TORRENTE 4: LETHAL CRISIS

Cuando a uno le gusta tanto el cine no puede ignorar una película fenómeno de masas como esta. No trato de justificar su visión ya que tenía claro que quería verla porque estaba seguro que pasaría un buen rato de risas aunque haya que dejar fuera del cine tus prejuicios. Con versión en 3D, la cual no considero necesaria, "Torrente IV: Lethal Crisis" (5/10), Santiago Segura consigue entretener a base de los numerosos cameos de personajes famosos, personajillos, famosillos, frikis variopintos y estrellas de los medios. Sólo con esto ya pasas el rato. Pero además, se recopilan todos los gags que uno espera de un ser tan inmundo como "Torrente", con sal muy muy gorda, escatología, tetas, fealdad, putiferios, droga, futbol, racismo extremo, fascismo a raudales, ... ¿Cómo es posible divertirse con esto? Muy fácil, tomándoselo con mucho humor y acudiendo libre de prejuicios, dispuesto a no tener en cuenta la parte ideológica de la película, porque es un instrumento para provocar risa, pero que desgraciadamente refleja en gran medida la idiosincrasia del pueblo español. Y ese es el valor, que en ese cuadro grotesco hay demasiados personajes reconocibles en nuestra realidad política, económica, social, es decir, en nuestro día a día. Por eso le gusta a la gente, porque están todos y más los que a diario salen por la tele para bien, pero sobre todo, para mal. No me cabe duda que será un enorme éxito de taquilla (no hay más que ver la sala llena, cosa casi imposible para cualquier película ncluso americana) y Segura, que ha descubierto en Torrente su mina de oro, salvará su crisis, con una parodia de la crisis letal en que estamos todos inmersos, rascando los bolsillos de los sufridos afectados que,gustosamente, abandonarán durante 90 minutos su realidad para reírse de las miserias y apariciones de tantos conocidos rostros televisivos. Esto si que sería para hacer un estudio sociológico pero tal vez no nos gustaría mucho saber sus resultados.

CUESTION DE PRINCIPIOS

Es "Cuestion de principios" (6/10) una película que da mucho de sí, provoca reflexiones e invita a la discusión, lo cual de por sí ya es muy loable. La dignidad de la persona, los principios morales, esa cosa tan importante, puede ser vista desde diferentes perspectivas y, tal vez, todas ellas sean éticas. Aquí se le da una vuelta de tuerca y se pone en entredicho porque siempre puede haber razones sentimentales, económicas, vitales, que te hagan rectificar y ordenar tus prioridades. Quizás no como dirían los Hermanos Marx: "Tengo unos principios pero si no te gustan los cambio por otros". Es más sutil. Y nadie como los argentinos para dialogar sobre estos temas tan filosóficos. Entretiene y te obliga a tomar partido, a reflexionar sobre qué harías tú en una situación similar.

INCENDIES

Película canadiense densa y emotiva sobre búsqueda de familia desconocida para encontrar identidad perdida. En "Incendies" (7/10), la lectura de la herencia de una madre supone una bomba sobre sus dos hijos que descubren la existencia de unas vidas que ni siquiera sospechaban pero que no pueden ignorar y sólo con la investigación del pasado de la madre podrán conseguir la paz que les permita vivir. Y en esa búsqueda descubrirán las contradicciones del mundo árabe, y muchos incendios, reales y vitales. Película intensa que requiere mucha atención pero te recompensa con sensaciones y emociones tal vez lejanas pero conocidas y asimilables.

SECUESTRADOS

Ver "Secuestrados" (8/10) es un golpe en la mesa de nuestras vidas. Hiperrealismo de situaciones de la vida cotidiana (un atraco a una familia que vive en un chalet de una urbanización de las afueras de Madrid). Te retorcerás en tu butaca y sufrirás casi tanto como lo hacen los personajes de la familia víctima del secuestro (perdón por esta exageración porque es imposible). Dura hasta extremos casi inaguantables y con un castigo final que no esperamos. Todo es reconocible, real, sincero. Tal vez por eso es tan fuerte, porque está ahí y nos negamos a aceptarlo (ojos que no ven, corazón que no siente). Y nos lo ponen en bandeja de plata, con toda su mala leche para que no seamos tan ingenuos y bienpensados, para que reconozcamos que tenemos mucho por delante para lograr una sociedad en paz. Demasiado dolor y mucha violencia. Pero es necesaria y, con todo, una magnífica película, aunque sea un cine tan desagradable. Hay que darse de vez en cuando un baño de realidad, aunque duela. Por favor, sufridla.

BIENVENIDOS AL SUR

A mí me recuerda a las películas españolas de los primeros años de la democracia, exagerada y con mucha sal gorda para hacer reír. No creo que los prejuicios que uno pueda tener respecto a un lugar geográfico (en este caso, el sur de Italia, un pueblo cerca de Nápoles), deba filmarse como un esperpento para reirse de los lugareños por mucho que luego se compruebe que son humanos, con virtudes y defectos como los demás, del Norte, Este u Oeste. Explotar el éxito de público de la francesa "Bienvenidos al Norte", no da credibilidad alguna a ésta réplica italiana. Película (5/10) para ver y pasar página, sin pedir explicaciones ni buscar intenciones, ni buenas ni malas. Te reirás tal vez si estás de buen humor porque es difícil sustraerse a hacerlo en determinadas situaciones que son clásicos de la risa. Pero dudo que te puedas identificar ni justificar con/a personaje alguno.

ISPANSI

Parece que Carlos Iglesias le ha tomado el gusto a hacer películas sobre episodios históricos de España. Esta vez se trata de los españoles que tuvieron que marcharse a Rusia huyendo de los fascistas de la Guerra Civil Española. Sin embargo, pronto observamos que en "Ispansi" (españoles, en ruso) (5/10), son todos intenciones, buenas eso sí, pero con carencias fundamentales para que la historia sea creíble. Como ficción progre estaría bien como telefilme pero como largometraje que pretende impactar, no lo consigue en ningún aspecto sino en el climatológico, donde los espectaculares paisajes invernales de la Rusia más heladora impregnan casi toda la película, dejándola tan fría que cuando terminas de verla necesitas una copa para entrar en calor.